viernes, agosto 07, 2009

ya sí que no existe la pareja violeta
el príncipe cyan y la princesa magenta y el revoltijo de hematitas por la rayuela
es el barro que pisamos, completamente verde.
Estar enamorado es vestir a la moda de París, Paris
no nos quedará siempre amor
Todo es gris
y está en la materia.

costado

jibias multicolores
gigas de mi memoria
dejad el transformismo
para otro mar de lágrimas distinto